El pan de muerto es una de las tradiciones más emblemáticas de la celebración del Día de Muertos en México, que tiene lugar el 1 y 2 de noviembre. Se trata de un pan dulce que se elabora con una masa enriquecida con huevos, mantequilla, azúcar y aromatizada con ralladura de naranja y agua de azahar. Su forma simboliza los huesos y el cráneo de los difuntos, y se suele decorar con azúcar o ajonjolí por encima.
Hoy te enseñamos cómo hacer pan de muerto casero paso a paso, con ingredientes sencillos y un resultado espectacular. Sigue leyendo y descubre la receta de este pan de muerto tradicional, que podrás disfrutar solo o acompañado de una taza de chocolate caliente.
Ingredientes para hacer pan de muerto casero
Para hacer esta receta necesitarás los siguientes ingredientes:
– 700 g de harina de fuerza
– 115 g de mantequilla a temperatura ambiente
– 3 huevos
– 50 ml de leche
– 20 g de levadura seca de panadería
– 150 g de azúcar
– Ralladura de una naranja
– 1 cucharadita de agua de azahar
– Una pizca de sal
Para decorar puedes usar:
– 100 g de azúcar
– 100 g de ajonjolí
– 100 g de mantequilla derretida
– 1 huevo batido
Cómo hacer pan de muerto casero paso a paso
Preparación
1. Lo primero que debes hacer para preparar el pan de muerto es activar la levadura. Para ello, mezcla la levadura con 8 cucharadas de agua tibia, una cucharada de harina y una cucharada de azúcar. Remueve bien hasta formar una pasta y deja que repose en un lugar cálido hasta que doble su volumen.
2. En un bol grande, mezcla el resto de la harina con la ralladura de naranja, el azúcar y la sal. Haz un hueco en el centro y agrega los huevos, la leche y el agua de azahar. Incorpora también la levadura ya fermentada y empieza a amasar con las manos.
3. Añade la mantequilla poco a poco, amasando bien cada vez que agregues un trozo. La masa debe quedar suave, elástica y ligeramente pegajosa. Si es necesario, puedes añadir un poco más de harina, pero no demasiada, ya que el pan de muerto debe quedar esponjoso.
4. Forma una bola con la masa y colócala en un bol engrasado con un poco de aceite. Cubre el bol con un paño húmedo y deja que la masa leve durante unas dos horas o hasta que doble su tamaño.
Amasado
5. Pasado este tiempo, desgasifica la masa con las manos y divídela en porciones. Reserva una parte de la masa para hacer las decoraciones del pan de muerto y con el resto forma bolas del tamaño que quieras. Coloca las bolas en una bandeja de horno forrada con papel vegetal, dejando espacio entre ellas.
6. Con la masa reservada, haz bolitas pequeñas para representar los cráneos y cilindros para representar los huesos. Haz tres cortes en cada cilindro para darles forma de hueso. Coloca una bolita en el centro de cada bola de masa y dos cilindros cruzados sobre ella, presionando ligeramente para que se peguen.
Horneado
7. Pinta los panes con huevo batido y deja que reposen de nuevo hasta que aumenten su volumen. Precalienta el horno a 180ºC y hornea los panes durante unos 20 minutos o hasta que estén dorados.
8. Retira los panes del horno y píntalos con mantequilla derretida. Espolvorea azúcar o ajonjolí por encima, según tu gusto. Deja que se enfríen sobre una rejilla y ya tendrás listo tu pan de muerto casero.
Consejos para hacer un buen pan de muerto
– Para que el pan de muerto quede bien esponjoso, es importante usar harina de fuerza, que tiene más gluten que la harina común y ayuda a que la masa se desarrolle mejor.
– El agua de azahar le da un aroma muy característico al pan de muerto, pero si no la encuentras puedes sustituirla por esencia de vainilla o de almendras, o simplemente omitirla.
– El tiempo de levado de la masa puede variar según la temperatura y la humedad del ambiente. Lo ideal es que la masa doble su volumen, pero sin pasarse, ya que podría perder fuerza y desinflarse al hornearse.
– Puedes rellenar el pan de muerto con queso crema, mermelada, chocolate o lo que más te guste. Solo tienes que hacer un corte en la parte inferior del pan y rellenarlo con una manga pastelera.
– El pan de muerto se conserva bien durante unos días en un recipiente hermético o envuelto en papel de aluminio. También puedes congelarlo una vez horneado y sin decorar, y descongelarlo a temperatura ambiente cuando quieras consumirlo.
¿Qué significa el pan de muerto?
El pan de muerto es un elemento muy simbólico de la cultura mexicana, que se relaciona con la cosmovisión prehispánica y la fusión con el cristianismo. Su forma representa el ciclo de la vida y la muerte, así como el vínculo entre el mundo de los vivos y el de los muertos.
La bola central del pan simboliza el cráneo del difunto, mientras que los cuatro huesos que la rodean representan los cuatro rumbos del universo o los cuatro elementos: tierra, aire, fuego y agua. Algunas versiones del pan de muerto llevan también una bolita más pequeña en la parte superior, que simboliza el corazón o el ombligo del difunto.
El pan de muerto se ofrece en los altares de muertos como una ofrenda para los seres queridos que han fallecido, junto con otros alimentos, bebidas, flores, velas y objetos personales. Se cree que las almas de los difuntos regresan a visitar a sus familiares durante el Día de Muertos y disfrutan de los aromas y sabores de las ofrendas.
El pan de muerto también se consume como una forma de recordar y honrar a los muertos, compartiendo con ellos el pan de la vida. Es una manera de celebrar la vida y la muerte, y de mantener viva la memoria y la identidad de los antepasados.
Conclusión
El pan de muerto es una receta tradicional de México que se elabora con motivo del Día de Muertos, una celebración que honra la memoria de los seres queridos que han fallecido. Se trata de un pan dulce que se aromatiza con ralladura de naranja y agua de azahar, y que se decora con formas que simbolizan los huesos y el cráneo de los difuntos.
En este artículo, te hemos enseñado cómo hacer pan de muerto casero paso a paso, con ingredientes sencillos y un resultado espectacular. Esperamos que te haya gustado esta receta y que la pongas en práctica para disfrutar de este delicioso pan en compañía de tu familia y amigos.